Ribadeo, 20 de setembro de 2013. O presidente da Asociación de Comerciantes, Industriales, Servicios y Autónomos de Ribadeo, Roberto Rivas, tilda de continuista o verán de 2013, “ya que a pesar de haber recibido a muchos más visitantes que en años anteriores el consumo en el sector hostelero y en el de la restauración se ha mantenido, no ha sufrido variaciones”.
Rivas Tomé indicou que “el mes de julio fue flojo para el sector hostelero debido al mal tiempo que se registró en la primera quincena. Luego se recuperó y en agosto fueron miles los turistas que llegaron a Ribadeo. La climatología favorable registrada el mes pasado ayudó a que la campaña fuese medianamente buena”. O presidente de ACISA sinalou que “el consumo se mantuvo con respecto al año anterior. Esperemos que el 2013 haya sido el punto de inflexión para empezar a salir de esta crisis que nos afecta y para que comience a mejorar la situación en la hostelería y la restauración”. Roberto Rivas suliñou que “Ribadeo y la comarca de A Mariña está siendo una zona muy apetecible para el turismo, debido a su paisaje, a su gastronomía y a sus propuestas, pero sobre todo debido a sus precios. Somos una zona muy asequible para los visitantes, ya sean nacionales o extranjeros”.
Pola súa banda, o secretario de ACISA, Roberto Ramos, asegurou que “el pequeño comercio cerró el verano de 2013 con un descenso medio de las ventas que se sitúa entre el 5 y 10% con respecto al año anterior, a pesar de las rebajas y de la llegada récord de visitantes a Ribadeo. Siendo un dato malo, ralentiza la caída producida en los dos años anteriores y hace atisbar un cierto optimismo hacia el futuro”. Ramos engadiu que “mientras el sector de moda, complementos y calzado mantuvo el tipo, el segmento de equipamiento del hogar ha vuelto a sufrir un revés, lastrado por la crisis y el pinchazo inmobiliario. Junto a la crisis, en la evolución de la facturación del comercio también ha influido la cuantía de los descuentos aplicados (de hasta el 70%) y que los turistas han llegado con presupuestos muy ajustados”.
Roberto Ramos, empresario do sector, manifestou que “en general los empresarios lamentan que la liberalización de las rebajas, antes limitadas a dos períodos concretos al año, ha supuesto que éstas se hayan desvirtuado y hayan perdido el efecto llamada que ejercían sobre los compradores”. Ramos é optimista: “creo que hemos pasado lo peor y que se iniciará una lenta, pero continua mejoría. En estos tiempos de crisis el pequeño comercio ribadense ha demostrado su fortaleza y capacidad de reacción sabiendo adaptarse a la situación, ajustando sus costes, invirtiendo en campaña de fidelización, retención y captación de clientes (apoyadas y propiciadas muchas de ellas por ACISA y CCA) y manteniéndose en la primera línea de toda la Mariña y el Occidente astur”.