O acto, que se celebrou na Casa da Cultura, congregou a numeroso público e, ademais do autor do libro, interviñeron a concelleira de Cultura no Concello de Vegadeo, Arantxa González; o catedrático de Lingua e Literatura española José Antonio Fernández Vior, que é o autor do prólogo da novela; e a escritora Belén Rico Prieto. En representación da editorial Lar Libros asistiron Pablo Pérez e Manuel López.
Nicolás Fernández Suárez del Otero naceu en 1948 en Vegadeo, a 500 metros da liña divisoria con Galicia, e conta: “desde niño hablé castellano y castrapo, o sea un gallego descafeinado del pueblo llano. Y siempre me sentí, como mi padre, más gallego que astur. A los 19 años me examiné de Preuniversitario en Oviedo, ya trabajando como educador titulado en Colegios Menores de Juventudes. De ahí me ofrecieron incorporarme a la Universidad Laboral de Cheste (Valencia), que fue el mayor complejo de internado del mundo, con 5.000 alumnos. Y durante 42 años, once meses y un día tuve el privilegio de dedicarme a la enseñanza, tarea que me apasionó desde niño. Me licencié, también trabajando, en Geografía e Historia en la Universidad Complutense de Madrid”.
O escritor engade: “mi primer premio literario lo obtuve a los veinte años, por un cuento titulado Aquel inválido. Otros galardones posteriores me facilitaron el acceso a colaborador habitual de diversos medios, entre ellos Diario-16 / La Región de Castilla la Mancha, El Día, El Independiente, Teletoledo y, esporádicamente la SER y Cadena RATO. Los galardones más preciados fueron el Cervantes de la Universidad Popular de Castilla la Mancha, en tres ediciones diferentes, y el Primer Premio Internacional de Escritores en Castellano, por Paisaje interior. Fui miembro de la Asociación Internacional de Periodistas de Prensa, Radio y TV. Y dirigí la revista Toledo Magazín hasta su cierre”.
Para finalizar Nicolás Fernández comenta: “vivo y espero morirme en San Ciprián, mi actual y venturoso lugar en el mundo, donde eché el ancla a mediados de octubre de 2020. Y en la Mariña Lucense se pone de largo mi novela Aguafuerte en gris, tras veinte años de trabajo a corazón abierto”.